lunes, 14 de mayo de 2018

La terrible y definitiva prueba


Se apuntaron a una escuela de música a unos ciento cincuenta kilómetros de su casa.

Mikel y Nina, dos unicornios muy coloridos, se prepararon para asistir a la prueba que les determinaría su carrera musical. Tenían que ir en AVE ya que su madre, Maika, no podía llevarlos porque ese día había una importante conferencia a la cual tenía que acudir. Ellos fueron a coger el tren  aquella mañana de dos de marzo y cuando llegaron vieron algo extraño: ¡El AVE se había estropeado! 
    
De pronto apareció una estela morada y entonces salió un hada que les ayudó.
                                                                                            Laura Isabel Seco Alonso (1º ESO-A)